El aprendizaje y la práctica constante: caminos de placer.

Hablamos con el egresado de A Voz Academia Camilo Maldonado, vocalista de la agrupación Árbol de ojos, ingeniero de sonido y locutor comercial. En su paso por la academia alimentó deseos y conocimientos acerca de este mundo del doblaje que atrapa y enamora.

Por: Caterine Casas

En tiempos de pandemia, Camilo encontró el momento perfecto para ampliar su técnica vocal e inscribirse en el curso internacional Voice Over Talent, en línea, abierto por A Voz Academia de Expresión y Doblaje.

Estamos viviendo una coyuntura global en la cual las relaciones interpersonales y académicas se han visto obligadas a la virtualidad y aunque la distancia física no es cautivadora, para el músico y locutor fue una oportunidad perfecta.

Maldonado lleva varios años trabajando en locución comercial y todo su aprendizaje ha sido autónomo o viendo a sus colegas de locución en acción. Esta experiencia le permitió homologar dos niveles del curso Voice Over Talent y entrar al nivel avanzado, en el cual descubrió el arte del doblaje y el enfoque de actuación e interpretación que le ofrecía la academia, herramientas que le aportaron en su constante aprendizaje. 

La pandemia, sin lugar a duda, ha perturbado nuestro entorno económico y social; no obstante, también ha sido una situación transformadora, la cual nos ha mostrado oportunidades que estaban fuera de nuestro punto de atención.

¿Cuál es el mejor recuerdo que tienes del Curso Voice Over Talent?

El mejor recuerdo, sin duda, es el último momento del curso, la muestra de talentos. Me encantó la evolución del aprendizaje, la creatividad de cada compañera y compañero cambiando los guiones y plasmando la escena de doblaje

Camilo, como te sentiste en el proceso de aprendizaje con A Voz Academia.

Me pareció interesante, llevaba bastante tiempo sin compartir un espacio académico. Me sentí muy bien, las herramientas que aprendí me parecieron muy útiles y los profesores muy adecuados.

¿Crees que cualquier músico o persona que trabaje con su voz podría ejercer el oficio de voice over o del doblaje?

Yo soy de los que cree que cualquier persona puede hacer cualquier cosa. Sin duda el tema de ser músico, ser actor o trabajar en cosas creativas que desarrollan los sentidos o el oído, obviamente ofrece herramientas que dan un poquito de ventaja. Pero creo cien por ciento que cualquier persona puede hacer lo que quiera en la vida, lo único que se necesita es perseverancia, mucha disciplina y ganas.

Creo que cualquier persona podría ejercer cualquier oficio, no creo que el hecho de ser músico me hace al otro día locutor. La práctica y el aprendizaje constante te dan cualidades que se adquieren con el tiempo.

Dime un sonido o ruido que te produzca placer.

La música, el sonido bien hecho. Una voz bien grabada y armónica me produce un placer divino. Tener los parlantes y escuchar una grabación bien hecha me produce un placer gigantesco.

Tengo una afinidad, en particular, por las voces bonitas y especialmente por las armonías que pueden generar. Cuando dos voces están en perfecta armonía dentro de la escala genera un bzzzzzzzhhhhhh, que me parece muy placentero.

El sonido de la armonía de dos notas que están hechas una para la otra, tanto en voz como en piano o lo que sea. Esa sinergia que se genera y el ruido que alcanza a generarse.

¿Canción favorita?

Decir una canción favorita es totalmente imposible. Tengo una afinidad con Black Bird de los Beatles porque representa mucho a mi esposa y a mí, es una canción importante en mi vida, pero no es mi canción favorita. Jubilee Street de Nick Cave. También estoy escuchando a Marvin Gaye.

¿Y un sonido o ruido que aborrezcas?

¡Ufff! Sin duda, sin duda, el ruido de los carros, odio el pito de los carros. Estar en la calle y oír que otra persona le pita a otra me genera desespero. No solo es un tema auditivo, sino también es un impacto emocional.

Aparte de ser ingeniero de sonido, músico y voice over, ¿qué otra profesión u oficio te hubiese gustado ejercer y por qué?

Alcancé a estudiar medios audiovisuales con énfasis en cine, quería aprender el lenguaje audiovisual para poderlo aplicar a mi trabajo como ingeniero y pos productor de sonido. Me hubiera encantado haber terminado de estudiar cine para ser director o fotógrafo.

Otra cosa que me interesa muchísimo es ser un A&R, chévere, todavía no es tarde. Un A&R en una disquera o alguien que está en busca de talentos, buenas canciones y volverlas realidad.

¿Película favorita?

Durante muchos años fue Manhattan de Woddy Alen. Consumo muchísima música y cine y es muy difícil llegar a una sola. Es más, decir que son tres es muy complicado. En una época, la película Sin aliento (À bout de soufflé) de Jean-Luc Godard. El director, Wong Kar-Wai también me gusta muchísimo.    

¿Qué te enciende (creativamente, espiritualmente o emocionalmente)? 

Hoy en día, la tranquilidad. Yo le digo tranquilidad a lo que la gente le llama felicidad porque las emociones suben y bajan.

Estar en un momento que me lleve a un punto de concentración. Encontrar ese lugar, donde a pesar del movimiento o del stress, encuentre paz mental, eso es lo que me motiva a seguir haciendo las cosas que hago, el placer que genera estar enfocado.

Me desmotiva el hecho de hacer cosas que tengan que ser juzgadas, por ejemplo hacer música para publicidad. A veces estas trabajando en una canción y te emocionas porque te parece que está buenísima y a la persona a la que le trabajas no le gusta. Claro, el cliente debe expresar su inconformidad, sin embargo es inevitable ese sentimiento de convertir una canción en un producto, eso a veces es un poco difícil de interiorizar. ■